HiStOrIa SuRrEaLiStA (escrita por Sole)

Antes de empezar, querría haceros una advertencia, lo que a continuación os cuento, por muy surrealista que os parezca es más que cierto.

Situaros: patio de un colegio, hora del recreo, un campo de fútbol, y en juego más de cinco partidos a la vez, un montón de niños corriendo de un lado para otro, cinco porteros por portería y como es lógico 5 PELOTAS (ojo al dato, que es importante), ah! Y se me olvidaba TODAS IGUALES!!:naranjas y de goma espuma.

Yo con mis peques de 4 años en nuestro rincón, jugando inocentemente, cuando de repente, se monta una pelea en el medio del campo. Se supone que no es mi tarea atender a los mayores, pero como cuando hay follón todo el mundo se esconde… pues allá que va la Sole.

Motivo de la pelea: una pelota (era de esperar, ¿no?); un niño de 4º de primaria, y uno de 6º:

- “me has quitado la pelota”
- “que no que es mía”
- “que no, que mira que tiene un agujero aquí”
- “que no que la mía tiene una mancha allá”

Hasta aquí todo normal, yo cojo la pelota, intento averiguar de quien es, hasta que el más pequeño me dice que se la dé que sino llamará a su hermano. Yo le digo que llame a su abuela o a quien haga falta.

El caso es que aparece en escena el hermano, de 1º de la E.S.O., vacilón con ganas, y diciéndome que le dé la pelota a su brother. Intento razonar con él, pero no hay manera, así que decido que hasta que no se aclare la cosa, la pelota queda confiscada, y cuando quieran hablar como personas que me busquen.

El mayor se enfada, y me amenaza igual que el pequeño:

-¡Como no me des la pelota llamo a mi padre!!
Yo me partía de risa, (y a todo esto teníamos alrededor a todo el colegio)
- Llama a tu padre, a tu abuela o a quien quieras cariño
- ¡Pues te aviso que es antidisturbios!
- Por mí como si es Superman
Pues el niñato va y saca el móvil, llama a su padre.

Os juro que no habían pasado ni dos minutos, y veo entrar por la puerta del colegio un tío de dos por dos, con gafas de chungo y en una moto a toda leche ¡¡¡el padre!!!.

Ja ja ja, se baja de la moto como si fuera Dani Pedrosa y empieza a meterse con el otro niño, yo entro a defenderle, y se encara conmigo, repitiéndome una y otra vez que es antidisturbios ¡y yo maestra no te jode!.

Después de calmarle, le pregunto partiéndome de risa:

- ¿Pero usted ha venido hasta aquí solo por la pelota?
- SI
- Pues tome, y lárguese por favor

Coge la pelota, se sube a su megamoto y se pira a su casa a continuar comiendo.

Lo más fuerte de todo esto es que a la media hora viene el niño pequeño avergonzado a decirme que la pelota no era suya.

En fin, que ya sabéis si tenéis algún problema: LLAMAD AL PAPI ANTIDISTURBIOS ;-).